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STATEMENT

“Mi obra es el resultado de un quehacer artístico, una acción concreta, física y mental, que me guía hacia un conocimiento y crecimiento interior. Visualmente se presenta como una construcción de mundos oníricos, paisajes interiores, elementos y composiciones enigmáticas que me acompañan en el camino por el cual transito entre elementos de potente visualidad 

Expresión y abstracción conducen mi lenguaje visual motivándome con la fuerza del primer impulso, la expresión primitiva del trazo, para luego desarrollar cada obra con infinitos detalles. 

Cada día en el taller es el momento de reflexionar mientras realizo mi oficio pictórico, con creatividad y intuición, propiedades que me mantienen en un estado latente frente a la tela. La energía y motivación que utilizo en este cometido no es menor, como tampoco mi necesidad de actuar con velocidad, desarrollando así la espontaneidad y la expresión que llegan desde mi inconsciente.  

Entre música y silencio se produce una meditación activa con la cual externalizo los mensajes que recibo desde mi interior para hacer consciente los pensamientos y sensaciones que llegan como mensajes que plasmo en la tela 

Formalmente, busco independizarme lo más posible de la figuración, potenciando la riqueza de los materiales y otorgándoles el valor estético que por sí mismo tienen. Es así como construyo estas visualizaciones que me permiten expresar mis sensaciones y expresión interna que se muestran en cada movimiento pictórico. Puedo decir que, impregnando la tela con dichos gestos en los cuales se retrata la energía, la pasión visual y mis pulsiones vitales, es que logro capturar esas sensaciones para evaluarlas como un crecimiento vital. Es una transacción emotiva y racional que, como artista, he aprendido a manejar y desarrollar. 

 Las imágenes que aparecen en mis obras van tomando un sentido y armando una narrativa personal que traspaso a la tela. Estas escenas son pequeños mundos, pero grandes señales, que me están ayudando a encontrar respuestas mientras voy construyendo un cuerpo de obra.  

Todo este cometido, y mis intenciones, fue descritas así  por el artista Arturo Duclos en el marco de la exposición Horizon Carré de 2016: Alejandro Méndez resuelve un caos armonizado entre ángeles y demonios en los intrincados tejidos viscerales  que dibuja y pinta. Esta compacta argamasa crea una  apertura caleidoscópica que deja entrever atisbos ambiguos de un paisaje, con evocaciones y escenas ocultas entre la red que contiene un medio ambiente a punto de desbordarse”.